“Levamos este tesouro em vasos de barro”
2 Cor 4, 7
2 Cor 4, 7
Qual é o Tesouro?
O Deus em quem acreditamos e a missão que Ele nos confia.
“Las eficacias de nuestra vocación no son fácilmente constatables y, sin embargo, es difícil pensar una misión más noble en la Iglesia. Nuestra misión es ardua para entender pero fascinante: iluminar la mente confusa de nuestros contemporáneos, colaborar en la sanación de corazones heridos, fortalecer una voluntad colectiva, cada vez más débil y manipulable. El mandato misionero de Jesús implica para nosotros un mensaje directo o indirecto a las personas con las que nos encontramos: como si Dios exhortara a través de nosotros a los hermanos: «No huyas de ti mismo porque el amor, la belleza y la libertad están dentro de ti, porque el Reino está cerca de ti, porque Dios está deseando habitar en tu vida». Éste es el evangelio que adolescentes y mayores, niños o ancianos están deseando escuchar en su interior, aún cuando en el fuero externo expresan lo opuesto. El anuncio del VD ahonda directamente en dos enfermedades espirituales graves que hay en la actualidad, al menos, en el mundo occidental: la falta de interioridad (superficialidad) y una afectividad agrietada (rota en muchos casos).”
Carta FMVD, A Velasco, Presidente FMVD, nov 07.
O Senhor põe no nosso coração o desejo de viver como Seus filhos amados, de reconhecer e agradecer todo o bem que nos tem feito, o quanto nos tem salvo e nos salva cada dia; Ele põe no nosso coração o desejo de viver como irmãos que se sabem com os mesmos direitos, e por isso se sentem comprometidos a dar o que têm recebido. Que sentem a dor, os gemidos do mundo, da criação…Que ouvem o Pai a pedir : «Se Eu pudesse contar contigo… se pudesses acolher o teu irmão e fazer caminho com ele, levantá-lo, erguê-lo, trazê-lo até Mim…»
A experiência renovada de que Deus alarga o horizonte das nossas vidas e nos “levanta” dá-nos a “ convicção profunda de que a experiência pessoal de encontro com o Deus de Jesus, ao tocar o profundo da pessoa, recria e transforma a sua vida. Esta mudança leva-a a actuar de forma diferente na realidade onde está inserida, dando-se assim uma autêntica transformação social”.
Somos Vasos de barro
Tantas vezes experimentamos que vivemos precisamente as mesmas realidades dos nossos contemporâneos… As dificuldades e contradições que a sociedade à nossa volta vive, que a Igreja sofre, são as mesmas que tantas vezes identificamos na Comunidade e em nós mesmos.
“…diezmados, pero no exterminados; saturados, pero nunca hastiados; con riesgos depresivos, pero sin renunciar a la esperanza; nos sentimos a veces escasos de fuerzas en la vida espiritual, en el amor fraterno, en la energía apostólica, en los deseos de radicalidad en la consagración; muchas veces, incluso, nos encontramos con grandes lagunas humanas que se evidencian más fuertemente con el pasar de los años. Damos pasos lentamente y con sufrimiento, mientras que los problemas surgen con rapidez… “
Mas não caminhos sozinhos. “E sabei que Eu estarei sempre convosco até ao fim dos tempos” (Mt 28, 20)